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Publicado el 17/07/2021
La naturaleza nos demuestra su sabiduría continuamente. Hay plantas que parecen adivinar nuestras necesidades y con sus flores, hojas, raíces, frutas y semillas nos brindan los nutrientes ideales en cada temporada. Las semillas de girasol con sus propiedades, por ejemplo, son una fuente de nutrientes ideales para nuestra salud, sobre todo en verano.
¡Sigue leyendo y descubre por qué!
El girasol (Helianthus annuus L.) es una planta herbácea anual originaria de América del Norte y Centroamérica, aunque se cultiva en todo el mundo para usos alimentarios y medicinales.
La parte comestible del girasol son las semillas, que también se conocen como pipas y de las cuales se obtiene el aceite. Este último es muy utilizado tanto para fines alimentarios como en la elaboración de productos terapéuticos.
Entre los nutrientes de la semilla de girasol destacan:
Las pipas crudas peladas contienen 574 calorías por 100 gramos y tomadas con moderación son ideales también en dietas para la pérdida de peso. Eso sí, es ideal optar por pipas sin sal ya que nos aportan preciosos nutrientes sin los efectos perjudiciales de la sal para la salud.
Además de sus propiedades nutritivas, las pipas de girasol son grandes aliados de la salud gracias a sus compuestos:
El aceite que se obtiene de las semillas de girasol impide la formación o el desarrollo de los microbios, por lo que se utiliza en preparados de uso tópico para el cuidado o el tratamiento de las afecciones cutáneas.
Por sus propiedades emolientes, la semilla de girasol también se aprovecha para la elaboración de productos cosméticos para hidratar y proteger la piel, el pelo y las uñas.
Ahora que ya conoces las propiedades de las semillas de girasol, vamos a descubrir algunos de sus beneficios.
En otro artículo hemos mencionado las pipas de girasol por su alto contenido en vitamina E, un nutriente esencial para combatir los radicales libres que causan el envejecimiento prematuro de tejidos y órganos.
Los antioxidantes de las semillas de girasol también protegen de enfermedades cardiovasculares, algunos tipos de cáncer y ayuda a controlar el nivel de azúcar en sangre en personas con diabetes de tipo 2.
Las pipas de girasol son especialmente indicadas en la dieta en verano por su acción antiinflamatoria y antioxidante, que ayuda a proteger la piel, el pelo y las uñas de las agresiones externas (rayos UV, aire seco, bacterias, etc.).
En este sentido, puede ser una buena idea añadir pequeñas cantidades de pipas de girasol en las ensaladas o tomarlas entre horas. Pero también puedes utilizar remedios naturales y productos cosméticos que aprovechan los principios activos de las semillas de esta planta.
Hay muchas opciones en el mercado, desde los champús con extracto girasol que protegen el color de tu cabello y aceites capilares solares, hasta ungüentos con aceite de girasol para pieles irritadas o con psoriasis.
Si eres deportista, deberías incluir estas semillas en tu dieta y tomarlas después de tus entrenamientos ya que te ayudan a reponer sales minerales y son una buena fuente de proteínas.
Por supuesto, puedes aprovechar los beneficios de las semillas de girasol para cuidar tu salud todo el año y no solo durante los meses de más calor.
Si tu objetivo es controlar los niveles de colesterol, hay complementos ricos en fosfolípidos obtenidos de las pipas de girasol que se pueden integrar en la dieta.
También puedes tomar perlas de aceite de oliva y de girasol que favorecen la regularidad y salud intestinal.
Por sus propiedades nutritivas y emolientes las pipas de girasol y sus extractos se aprovechan frecuentemente en la elaboración de productos para la infancia como cremas para la dermatitis de pañal o complemento alimenticio para favorecer el desarrollo neuronal y psicomotor.
Las semillas de girasol son un alimento rico en nutrientes buenos para la salud, pero se recomienda consumirlas con moderación por su alto aporte calórico. Como la mayoría de semillas y frutos secos, se pueden tomar cada día en pequeñas raciones.
Desde luego, evitaremos el consumo de semillas de girasol saladas o con saborizantes alimentarios que no solo aumentan el aporte calórico, sino que son contraindicadas en personas con problemas de hipertensión u otros trastornos cardiovasculares.
En definitiva, sobran los motivos para tomar las semillas de girasol por sus propiedades y beneficios. Sin embargo, hay que tomarlas con moderación y preferiblemente sin sal u otros aditivos para que sean beneficiosas para nuestra salud.
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