Flora intestinal


Probióticos naturales para la flora intestinal — guía rápida de compra

Los probióticos naturales para la flora intestinal son complementos alimenticios que incorporan microorganismos vivos beneficiosos para el equilibrio de la microbiota intestinal. Estas pastillas suelen incluir cepas como Lactobacillus acidophilus, Lactobacillus rhamnosus GG, Bifidobacterium lactis o Saccharomyces boulardii, cada uno con sus ventajas en el cuidado digestivo, pero no todas las cepas funcionan igual para todo tipo de personas.

Los suplementos alimenticios pueden venir en varias formas de presentación: en cápsulas gastrorresistentes, en cápsulas vegetales HPMC, en sobres o incluso en un vial líquido.

Muchos productos combinan probióticos con prebióticos como inulina, FOS o bien GOS para formar fórmulas simbióticas que servirán para alimentar a las bacterias buenas. Estos productos favorecen a tu organismo después de haber estado tomando antibióticos, llevando a cabo cambios en la rutina, viajando o en épocas de estrés digestivo. 

Las pastillas para regenerar la flora intestinal contribuyen a calmar malestares como hinchazón, gases, digestiones irregulares, aunque eso sí, solo te harán efecto si conviertes en costumbre combinar su uso con hábitos saludables.

Cómo elegir (criterios)

  • Cepas documentadas: Mejor si llevan Lactobacillus plantarum; Bifidobacterium longum o Saccharomyces boulardii, ya que poseen estudios que respaldan su uso.
  • UFC adecuadas: Debes buscar entre 1000 y 20000 millones de unidades formadoras de colonias por dosis diaria.
  • Protección gástrica: Apuesta por cápsulas gastrorresistentes o por tecnología que garantice que los probióticos puedan sobrevivir al entorno ácido del estómago.
  • Formato compatible: Sin gluten, sin lactosa, apto para veganos si lo necesitas.
  • Conservación práctica: Las cápsulas son mejores a temperatura ambiente, aunque algunas necesitan nevera.

Compatibilidades y marcas

Las cápsulas para la flora intestinal suelen ser compatibles con la mayoría de dietas. Si tienes intolerancias, los suplementos sin gluten y sin lactosa facilitan en gran medida la introducción. Muchas marcas se decantan por cápsulas vegetales en lugar de gelatina animal, de modo que también existe la opción para los veganos.

Los prebióticos naturales como la fibra de acacia o el psyllium se pueden tomar junto a los probióticos. Eso sí, si eres sensible a los FODMAP, es aconsejable una implementación lenta. Si te atreves, combinar estos suplementos con alimentos fermentados como yogur, kéfir o kombucha podría potenciar el efecto, ¿por qué no probar un enfoque más natural para recuperar la flora intestinal?

Preguntas frecuentes

¿Para qué sirven los probióticos?

Contribuyen al equilibrio de la microbiota intestinal. Además de eso, también pueden ayudar a la digestión y a nuestras defensas naturales. No sustituyen una alimentación equilibrada ni el consejo de un profesional sanitario.

¿Cómo tomar probióticos?

Sigue la dosis indicada por el fabricante. Tómalos con agua, evita bebidas muy calientes. Algunos se recomiendan en ayunas y otros con comida según la formulación.

¿Cuándo tomar probióticos?

En rutinas de cuidado digestivo, cambios de hábitos, viajes o tras periodos exigentes. Si estás tomando antibióticos, consulta con un profesional. 

¿Cuánto tiempo tomar probióticos?

Generalmente, los ciclos de uso oscilan entre las 4 y 8 semanas, aunque puedes espaciar las tomas si sólo buscas mantenimiento. Consulta con tu profesional si necesitas periodos prolongados.